Las imágenes de satélite tomadas entre julio de 2020 y el mismo mes de 2021 ponen en evidencia la disminución de niveles de nieve en la cordillera de los Andes en América Latina debido a la “mega sequía” relacionada con el calentamiento global. 

La cordillera de los Andes se enfrenta a nevadas históricamente bajas este año, durante la mayor sequía en una década que los científicos relacionan con el calentamiento global. Las escasas lluvias y nevadas están dejando muchas de las majestuosas montañas entre Ecuador y Argentina con una capa de nieve irregular o sin nieve en absoluto, con el marrón rocoso expuesto. 

Mientras las precipitaciones disminuyen y los glaciares retroceden en la región, las comunidades que dependen de las montañas para el suministro de agua sufran escasez, dijo Ricardo Villalba, investigador principal del Instituto Argentino de Estudios de Ciencias de la Nieve, los Glaciares y el Ambiente. 

“Aquí estamos viendo un proceso de disminución a largo plazo de las precipitaciones, una mega sequía”, dijo. “Si mirás los niveles de precipitación en este momento para toda la Cordillera, muestran que no ha nevado en absoluto o ha nevado muy poco”.

El hemisferio sur experimentando un invierno sin nevadas, cuando estas deberían alcanzar su punto máximo. Las estaciones de esquí han reabierto después de largos cierres durante la pandemia y están atrayendo a los esquiadores a la frontera entre Argentina y Chile, pero la escasez de nieve obliga a muchos centros turísticos a acarrear nieve para cubrir las pistas, o ahacer nieve artificial. 

Las imágenes de satélite de julio de 2020 y de este año muestran una marcada disminución de la capa de nieve, lo que también se refleja en las mediciones del nivel del agua de los ríos. Los glaciares de los Andes, que entre 2000-2010 permanecieron del mismo tamaño o incluso crecieron, ahora están retrocediendo, dijo Villalba.

El especialista agregó que “Los glaciares están en un proceso de retroceso muy dramático que es mucho más acelerado que lo que hemos visto antes. Esto lamentablemente está sucediendo en todos los glaciares de la Cordillera, y está fuertemente ligado al proceso de calentamiento global que está afectando a todo el planeta”.