Previamente, en el espacio público donde se llevó a cabo la actividad, el Municipio realizó un operativo de saneamiento ambiental donde se erradicó un minibasural con la intervención de voluntarios, familiares, vecinos y vecinas. El mural fue pintado por la artista Pato Leiva y el banco rojo se hizo a partir de madera reciclada.

Desde el Gobierno de la Ciudad de Resistencia se recorrió casa por casa para informar a los vecinos y vecinas del barrio sobre la propuesta, y para concientizar sobre la violencia de género y el cuidado del ambiente.

La secretaria de Desarrollo Humano e Identidad, Laura Balbis, sostuvo que “la gestión municipal acompañó diferentes iniciativas referidas a la lucha contra la violencia de género y a la eliminación de los femicidios”, y agregó que “es necesario acompañar a las víctimas y a los familiares de la violencia de género”.

La subsecretaria de Integración Comunitaria y Desarrollo Productivo, Patricia Alarcón, remarcó que “se conmemoró el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia de Género en un lugar emblemático, donde Marilú fue asesinada, y por eso se hizo un recordatorio con un mural y un banco rojo, que sirve para sensibilizar a las personas sobre la violencia que se desarrolla contra las mujeres”, y continuó diciendo que “es una política de Estado municipal tratar de afianzar la visibilización de la violencia de género”.

La coordinadora de Políticas Territoriales de Género del Municipio, Magdalena Corbalán, señaló que “se retomaron una serie de acciones que se iniciaron anteriormente en jornadas voluntarias con la comunidad, donde organizaciones, áreas institucionales de la Municipalidad y vecinos y vecinas hicieron posible que esto, que era un basural, se convirtiera en el comienzo de un camino que hay que seguir sosteniendo”, y añadió que “se apunta a tener espacios de dispersión y de fortalecimiento de redes comunitarias, donde se puedan tocar problemáticas como la violencia de género”.

El hermano de Marilú, Juan Carlos Robledo, agradeció a la gestión municipal por concretar la limpieza integral del lugar, y destacó que “esta fue una convocatoria muy importante y positiva en homenaje a Marilú, por el hecho que se recuperó un espacio público que estaba abandonado y donde se darán charlas vinculadas a la diversidad de género y el cuidado del ambiente”, y finalizó asegurando que “tanto el mural como el banco rojo son la representación de una lucha que está lejos de terminar para que se eliminen por completo los femicidios”.