POLíTICA
16 de septiembre de 2021
Martín Guzmán recibió tres llamadas de Cristina Kirchner y dejó saber que “no se va”
El ministro de Economía resiste el embate K como el Presidente. Al teléfono con la vicepresidenta, entre las renuncias y la agenda.
Martín Guzmán no parece ser el tipo de funcionario que exteriorice la tensión. En un día en que sus propios compañeros de Gabinete en el Gobierno de Alberto Fernández, tendieron un escenario de renuncias masivas motorizadas por Cristina Kirchner para provocar la suya, el ministro de Economía no movió un ítem de su agenda programada. "No se va. Se queda", afirma a Clarín alguien que lo cruzó este largo miércoles. Apenas si Guzmán modificó su logística -pasó más tiempo en la Rosada- pero hubo momentos fuera de calendario: atendió no uno sino tres llamados no habituales, desde el teléfono de la vicepresidenta, según confirmó alguien bien al tanto de su día agitado. "Le ratificó a su entorno más cercano que se queda, no se va", dijo un interlocutor del ministro, que habría repetido cual mantra esa frase desde el mediodía, cuando las cartas de renuncia a disposición de sus pares lo rodeaban. Sabido es que el objetivo de la movida del kirchnerismo duro, además del jefe de Gabinete Santiago Cafiero, era la salida de Guzmán, por más que sea desmentido a él y con llamados insistentes. Es que al margen de detalles importantes de su agenda -que incluía definir nada menos que la ley de Presupuesto en un día particular-, Guzmán habló de eso con Cristina Kirchner. Y dicen que la vicepresidenta le aclaró con insistencia que su idea final no era que dejara su cargo. De allí a creerlo, claro, hay un abismo. No hubo más detalles de las conversaciones entre el ministro jaqueado y la vice que jaquea, salvo alguna corrección que uno le hizo a otro sobre alguna publicación de un medio con alguna indiscreción malinterpretada. Sólo se supo que fueron tres diálogos no muy espaciados en el día y uno más corto que el otro. Guzmán empezó y terminó este miércoles "como si fuera un día normal", dicen en su entorno, cada vez más reacio a la réplica. "Está tranquilo", agregó alguien que habló con él ya bien entrada la noche. Estuvo activo. Es que si Cafiero fue, pasadas largo las 22, el último funcionario en dejar la Casa Rosada este miércoles, Guzmán no se quedó atrás: hasta la medianoche estuvo con los detalles finales de lo que se sabrá este jueves sobre su proyecto de Presupuesto, o formalmente, la ley general de Gastos y Cálculo de Recursos de la Administración Pública Nacional. Por esa medida, dicen que Guzmán también estuvo en contacto continuo con Sergio Massa, el presidente de la Cámara de Diputados y aliado del frente cada vez más tripartito que gobierna. Y con Máximo Kirchner -no sin discusiones-, creador de La Cámpora que renuncia a pedido.